Tras varias semanas de estudio dedicado a la vida y obra de Miguel de Cervantes, el aula se convirtió en un espacio de reflexión sobre el autor más icónico de la literatura española. La profesora, en un ejercicio de creatividad y análisis, pidió a sus alumnos que redactaran sus propias impresiones sobre él, dando lugar a una colección de textos llenos de originalidad y diversas interpretaciones.
Desde los que destacaron su ingenio y la profundidad de su obra, hasta aquellos que imaginaron la difícil vida que llevó Cervantes entre batallas, encarcelamientos y dificultades económicas, cada redacción reveló una mirada distinta sobre el célebre escritor. Algunos jóvenes se sumergieron en la complejidad de Don Quijote de la Mancha, analizando los valores que aún resuenan en la sociedad actual, mientras que otros optaron por explorar el lado humano del autor, preguntándose qué sentimientos lo habrían impulsado a crear personajes tan inolvidables.
La profesora, al leer las redacciones, no solo vio el impacto de Cervantes en sus alumnos, sino que también descubrió en cada texto un puente entre el pasado y el presente, demostrando que la literatura sigue viva en las nuevas generaciones.
Así, entre palabras y reflexiones, Miguel de Cervantes volvió a cobrar vida en las aulas, dejando su legado impreso en los pensamientos de quienes ahora, siglos después, continúan descubriendo la riqueza de su obra.
También os ofrecemos un testimonio gráfico de la pequeña exposición de las redacciones llevada a cabo en el centro .


